El ciudadano al uso, como lo soy yo,  consume los productos que compra en las tiendas y nunca cultiva la tierra por tanto no los ve crecer salvo en el caso de que su instinto o  su curiosidad le lleven a preguntarse de dónde salen y se le ocurra ir en su busca alguna vez. En ese caso ¡tendrá que salir al campo! y ver la tierra labrada, conocer a los agricultores, que le expliquen cómo siembran, y ver como se recogen los frutos. Pero sobre todo, acercarse a los procesos naturales.

Cuando observas la naturaleza tomas conciencia de muchas cosas bonitas e interesantes. Una de ellas es que  los frutos de los árboles , esos que nos comemos a menudo (manzanas, limones, naranjas, etc, etc) están pensados para alimentar a las semillas que se forman dentro, ¡Por eso son tan saludables! Todas las sustancias sirven a ese efecto, sólo hay que entender que las semillas son su forma de reproducción.

¡Qué poco pensamos en esto cuando vamos a un supermercado a comprar lo que nos han anotado en una lista!!^Pues qué poco pensamos, directamente, según y cómo.

¡Vale la pena dedicar un rato a reflexionar! y sorprenderse.

Se empieza por aquí…